La hiperconexión actual ha permitido que muchos temas anteriormente tabú se hablen de manera libre, logrando así sensibilizar a las personas. El Mobbing o acoso laboral, es uno de esos temas.
El mobbing es reconocido como acoso laboral. Y sigue la misma lógica del bullying pero en un ambiente adulto. Se basa en ataques físicos o psicológicos de una persona dentro del entorno laboral.
Si bien se le estudia desde la década de los ’80, fue en 1990 que una ponencia en el Congreso sobre Higiene y Seguridad en el Trabajo de Hamburgo sobre el fenómeno lo denominó mobbing.
Leymann, un conocido psicólogo laboral puntualizó que “para constituir mobbing, estas actividades deberían tener lugar de manera frecuente y durante largo tiempo, durante seis meses al menos, siendo susceptibles de lesionar mental, psicosomática y socialmente a la víctima”.
El número de personas que padecen mobbing según datos de la Organización Internacional del Trabajo llega al 7%, y la Unión Europea estima que quienes padecen acoso y discriminación laboral en sus países miembros llega al 8%.
Las personas que pertenecen a minorías, ya sean por raza, religión, nacionalidad u orientación sexual son las que suelen padecer más casos de mobbing. Incluso quienes sufren alguna discapacidad física lo sufren cinco veces más que quienes no son discapacitados.
El mobbing puede ser perpetuado tanto por personas con el mismo estatus empresarial, es decir entre compañeros. Como también por jefes o superiores que utilizan la posición de poder como excusa para el acoso.
Materialización del acoso laboral
El acoso puede llevarse a cabo realizando una o varias de las siguientes acciones.
✓ Hay un patrón de conducta: no se trata de una conducta aislada sino de situaciones repetidas en forma sistemática.
✓ Siempre aparecen acciones negativas hacia una persona, sean verbales o físicas o psicológicas.
✓ La intención siempre es victimizar a alguien
✓ Suelen provocar efectos postraumáticos: psicológicos o físicos
✓ Puede haber un superior que limita posibilidades de comunicación con los compañeros.
✓ La víctima puede ser cambiada de su ubicación y tareas laborales.
✓ Al acosado no se le asigna tareas, algo que en la jerga se conoce como “es congelado”.
✓ Es excluidos de cursos de capacitación y de reuniones
✓ Se desvaloriza el trabajo de la víctima.
✓ Se le cuestiona cualquier decisión que tome.
La importancia de prevenir
La prevención es posible y debería convertirse en una práctica de higiene y seguridad laboral empresarial. Algunas de las políticas aplicables puede ser:
✓ Admitir que esto puede ocurrir es primordial para evitar
✓ Establecer un sistema de ayuda fácil que garantice el anonimato
✓ Impartir formación específica sobre las acciones a tomar en caso de sufrir mobbing
✓ Establecer claramente las cargas laborales de cada puesto de trabajo para evitar la sobre o sub carga
✓ Capacitar a los superiores para manejar casos de violencia
✓ Desarrollar una cultura organizacional que contemple la planificación y diseño de las relaciones sociales